Saltillo, Coah.- La cocina típica neoleonesa es una de las más variadas en cuanto a sus influencias, pues tanto los judíos, los españoles como los tlaxcaltecas enriquecieron en gran medida el panorama culinario de la región.
La comida tlaxcalteca es como la mayoría de la gastronomía de México mestiza, sin embargo la tlaxcalteca presenta una influencia altamente prehispánica, la cual la caracteriza y la hace única y sobre todo, deliciosa. Desde tiempos remotos en tierras tlaxcaltecas los elementos gastronómicos ejes en el arte culinario han sido el maíz y el maguey, de este último se produce el aguamiel, cuya fermentación produce el pulque y sus variantes de frutas llamados curados.
La actual gastronomía Tlaxcalteca es una herencia milenaria de nuestros antepasados prehispánicos, enriquecida con importantes ingredientes españoles, que dan forma a una multitud de sabores, aromas y colores que son una auténtica delicia. El alimento por excelencia en nuestra región, desde tiempos inmemoriales, ha sido el maíz, al cual se le confería un origen divino; tal vez por ello, nuestros antepasados llamaron a su tierra Tlaxcallan, en honor a la tlaxcalli, nombre náhuatl de la que hoy conocemos como "tortilla".
La variedad de platillos tlaxcaltecas consiste en una larga lista en náhuatl como: tlatlapas, xocoyoles y nopalaxitles, hasta el huaxmole, el texmole y el chileatole; además de escamoles, los tlacloyos, huazontles y el huitlacoche. Y como elementos exóticos están los insectos como platillo tradicional los gusanos de maguey blanco , tecoles o chinicuiles y los chapulines entre otros.
La cocina regional tlaxcalteca está dividida en tres:
El norte, cuyo eje es el maguey, la carne de borrego, envuelta y cocida en pencas de maguey), mixiotes (carne envuelta con la cutícula de las pencas; las flores del maguey palmitos o mamaxtli.
En la región sur son los tamales, los moles y las hiervas del campo. En Tlaxcala la comida puede ser de vida diaria, festiva o ritual: la diaria no desmerece por su sencillez; la festiva atiende a los eventos sociales en las pequeñas poblaciones como: bautizos, bodas y funerales, y la ritual está vinculada a las celebraciones patronales de los pueblos y barrios.
En el centro de Tlaxcala se puede degustar diversos platillos, como entrada tlacloyos de frijol, ayocote o de haba, los escamoles (larvas de hormigas) y las quesadillas de huitlacoche, después se debe disfrutarde una deliciosa sopa de milpa, de haba, de nopales, las tlatlapas o la sopa tlaxcalteca y ya con el apetito abierto el pollo Tocatlán, los mixiotes de carnero, la carne en pulque, el pipían de ajonjolí rojo y verde acompañados de unas ricas tortillas a mano de maíz blanco o azul.
Los Postres los buñuelos con requesón y miel o los muéganos huamantlecos y los de Santa Ana Chiautempan, los tlaxcales (maíz o elote martajado con azúcar), las alegrías de amaranto, las palanquetas de cacahuate, los dulces de pepita de calabaza o los tamales de piñón y el pan de fiesta de Totolac.
Para acompañar todas estas delicias es indispensable un pulque o un curado de frutas o el "Verde Tlaxcala", bebida preparada con aguamiel, vodka, hierbabuena y limón, y para los que no consumen alcohol hay una extensa variedad de aguas frescas y atoles como el de amaranto, de masa o azul, de arroz y el famoso chileatole.
Debido al bloqueo comercial de los mexicas sobre los tlaxcaltecas, éstos carecían de sal para sazonar sus platillos, por lo que en sustitución utilizaron el tequesquite. Hoy, en Tlaxcala, se siguen sazonando algunos alimentos con tequesquite, lo que les da un toque especial. El arte culinario de la región se ha enriquecido con la abundancia de hierbas y plantas como cilantro, perejil, epazote, pápalo quelite, quintoniles, verdolagas, huauzontle, pipitza, miltomate, cebolla de rabo, chile, calabaza y nopal, del cual fue condimento muy importante uno de sus frutos: el xoconoxtle
Los insectos también formaban parte de las delicias gastronómicas de Tlaxcala, como los chapulines, chinicuiles (gusanos rojos de maguey), los escamoles (larvas de hormiga) y el ahuaxtle (huevecillos de mosco). Abundan también los charales, los ajolotes, los acociles (pequeños camarones de río) y los peces de río. Las flores como las de yuca, la de zompantle o colorín, la de calabaza y la jamaica, también forman parte de la gastronomía tlaxcalteca.
Con la masa del maíz se elaboran los tlacloyos con frijol o ayocote, a los que agregaban chile y epazote, tamales, atoles, pozoles y los indispensables tlaxcales. También del maíz se obtiene el sabroso huitlacoche. Barbacoa de carnero en mixiote de maguey. También se puede degustar la carne de res o de cerdo en pulque, algunos pipianes de pollo (con alguna influencia poblana) y el famoso mole que es preparado en variadas poblaciones con diferentes fórmulas y condimentos, como el llamado mole prieto, que se sirve con puré de carne de cerdo. El Pollo Tocatlán y el Pollo Calpulalpan son delicias con el sello de la cocina tlaxcalteca.
Para cerrar con broche de oro una excelente comida, se recomiendan los distintos tipos de arroz con leche, los buñuelos con requesón y miel de piloncillo, los dulces de pepita el pan de fiesta, los muéganos de anís y canela de Huamantla y las famosas alegrías. Si bien los tlaxcaltecas ya consumían dulces elaborados con semillas de amaranto y aderezados con miel de hormigas silvestres, no fue sino hasta la Colonia que conocimos la miel de abeja y la caña de azúcar, cuyas mieles o melazas dieron origen al mexicano piloncillo.